La reputación digital de los políticos en la cuerda floja según Francisco Canals, Director de Identidad Legítima En España existen más de 1.268 parlamentarios, 1.031 diputados, 139 responsables de cabildos insulares y 500 cargos públicos entre gobierno central y autonómico, uno de cada 2 tiene al menos un contenido lesivo indexado entre las primeras diez posiciones de Google afirma Francisco Canals, quien ha dedicado las últimas semanas a analizar, rastrear y estudiar la reputación online de los políticos en nuestro país. Entre las marcas políticas más atacadas se encuentran nombres como Ignacio González, Fátima Báñez García, Luis Bárcenas o José Bono.
Por el contrario entre los que proyectan una mejor imagen digital encontramos a Carme Chacón, José María Aznar, Xavier Trias o Luis de Guindos. Y es que la red tiene cada vez más capacidad para hablar de todos nosotros al margen de que nos guste o no, los algoritmos de Google indexan y localizan la información en base a criterios como la antigüedad, la popularidad o la variedad.
Pero es, sin duda el catalán Artur Mas, el líder más vilipendiado del momento, su marca personal recibe más de 7 noticias negativas cada 24 horas y es posible encontrar hasta un 75% de enlaces perjudiciales indexados en las primeras 100 posiciones de los principales motores de búsqueda.
Los profesionales de la política suelen vivir con resignación y ansiedad estos contenidos no deseados hasta el punto de convertirse en un tema tabú del que no se suele hablar en público afirma Canals. Estos ataques reputacionales representan el lado más oscuro de la red pero también la prueba, evidente, de que aquellos trabajos que conllevan una mayor visibilidad son a la vez los más susceptibles de recibir críticas, Canals apunta por último al auge de otras plataformas como Facebook y Youtube donde distintos usuarios vehiculan críticas a cargos y dirigentes públicos.
