Los ciberdelincuentes acceden a tu correo, toman el control del teléfono y se apoderan de tu cuenta personal
La reputación se puede perder por motivos muy distintos, uno de ellos es el robo o secuestro de numeraciones de WhatsApp. No en vano se ha convertido en la app más famosa de todos los tiempos. Su uso es imprescindible para la vida diaria y ya es una extremidad más del cuerpo humano.
Los ciberdelincuentes buscan información valiosa. En nuestro móvil guardamos nuestra vida: mensajes, fotos familiares, datos de clientes. Se trata de un “bien digital” muy codiciado.
¿Qué técnicas de ataque existen?
Una de las modalidades es acceder a la cuenta de e-mail de la víctima desde donde tomará el control del móvil. Desde ella enviará una petición de verificación y autenticará la verificación en dos pasos.
La sustracción física del teléfono móvil es otro modus operandi. El ladrón aprovechará para acceder directamente a tu cuenta de WhatsApp. Hurgará en los mensajes en busca de información valiosa y cambiará las claves dificultando que tú mismo tomes de nuevo el control.
Los estafadores utilizan momentos críticos (especialmente de noche) en ese momento el usuario duerme y no está disponible para responder a peticiones de verificación de WhatsApp.
Otro procedimiento es el del “amigo misterioso”. Una persona de nuestra lista de contactos nos enviará un mensaje indicando que ha cambiado su teléfono móvil. Como no logra vincular su WhatsApp con su nuevo número ha pensado en utilizar el nuestro para lograr leer el código de verificación, que ahora le deberemos enviar a él. En realidad, es un malhechor que se hará con el control de nuestro terminal.
¿Qué síntomas delatan que puedes estar en el punto de mira?
Recibir llamadas perdidas desde numeraciones no registradas.
Recibir distintas peticiones de verificación mediante SMS.
¿Por qué puede perjudicar tu reputación personal?
El delincuente puede enviar mensajes a tu lista de contactos y revelar información comprometedora que tú mismo almacenas en el teléfono.
En muchos casos pueden hacerse con el control de la cuenta y pedir un rescate para devolvértela.
También puede activar el desvío de llamada de manera que no sepa que se lo han robado
¿Cómo evitar ser víctimas?
Hemos de ser prudentes con llamadas de supuestos servicios técnicos que intentan convencernos de un problema técnico que en realidad no existe. En muchos casos se trata de ingeniería social para lograr el control de nuestra cuenta.
Activar un 2º correo electrónico de recuperación de cuenta.
Cambia el password al menos una vez cada 30 días.
Mantén el sistema operativo actualizado.
Utiliza un antivirus eficaz con sus correspondientes actualizaciones.
Falsas notificaciones mediante correos fraudulentos
Suplantación de números de WhatsApp (sustituyen el número del remitente por otro guardando la misma apariencia en el visor del teléfono).
E-mails procedentes de supuestas entidades bancarias.
